Parece fundirse la alegría
ante estos crueles momentos:
perdiéndose la libertad,
soltando la misma monotonía
ante amenaza de maldad,
entregando graves esperpentos,
mandando ahora y sin piedad
sonoras alarmas de rebeldía
prestando toda la atención
a un patético noticiario de cada día
reclamando a la humanidad
que llegue por fin la solución
esa gran fuerza de seguridad,
«antídoto para ponernos contentos».
ante estos crueles momentos:
perdiéndose la libertad,
soltando la misma monotonía
ante amenaza de maldad,
entregando graves esperpentos,
mandando ahora y sin piedad
sonoras alarmas de rebeldía
prestando toda la atención
a un patético noticiario de cada día
reclamando a la humanidad
que llegue por fin la solución
esa gran fuerza de seguridad,
«antídoto para ponernos contentos».
Mientras encontramos refugio
en nuestros pobres hogares
cuando toda ayuda es poca,
¡panorama cada vez mas sucio!
protegiendo a nuestros mayores
que no nos queden pesares
esperando tiempos mejores,
sin saber lo que nos toca,
la pequeña distancia se disloca,
toque de queda se convoca
necesitando ayuda de militares.
En un día enloquecido
pongo fuerza y unidad
con un toque colorido,
con algún verso distraído
deseando placer y alegría.
Todos en nuestro nido
en el pueblo o la ciudad,
el deseo no está en la lejanía,
pronto llegara la libertad
cumpliéndose otra fantasía
¡todos mis deseos de felicidad
ante un mundo desconocido!
«Envío unos besos de poesía».
Andrés Rastrilla
Poeta de Castilla
28 de marzo de 2020