Por Ascen Fernández
Ser madre a los 24 años es una aventura.
Ser abuela con 60, una responsabilidad.
Ser abuela con 60, una responsabilidad.
Intento adivinarme en tu mirada.
Y escucho tu voz al llamar.
Tus pasos agolpados te delatan.
Cierro mis ojos y te estoy viendo llegar.
ABU, ABU me llamas de camino.
Quieres verme y no sabes cómo llegar.
Yo te oigo sentado en el pasillo.
Con tus manos me quieres acercar.
ABU, ABU, me extiendes tus bracitos
esperando que te vaya a rescatar.
Y nos fundimos en un abrazo tierno.
Del cual no me quiero despegar.