miércoles, 4 de diciembre de 2019

Un regalo de aniversario

(Al padre del poeta)

Admiración
a la mejor compañía
por ser siempre paciente
ante todas las dificultades,
con ese tono coherente
por ti se decora esta alegría
ante malos momentos familiares,
sabiendo encajar fallecimientos
remontando la vida
con sus crueles realidades.

Admiración
por ser buen padre;
llevando siempre los galones
entre tormentas y tempestades
cambiando los guiones
ante todas las adversidades
en tiempos pasados
aguantando fríos y calores
con los pantalones mojados
en penurias y soledades.

Admiración
por saber hacerte querer,
tu saber y tu valentía
sustituyendo con arte y sabiduría
sabiendo hacer de madre 
para podernos complacer.

¡Viva tú, padre!
Por muchos años
muestra tu mejor semblante
haciendo frente a los daños,
tira siempre para adelante
no caigas en la melancolía
dejando tu trono vacante.

Por ello canto mis alegrías:
pues aguantaste todas dificultades
que siga brillando esa llama
taponando silencios y oscuridades;
yo de tu árbol soy una rama
soy tu hijo, bien lo sabes.

Tú eres grande, Andrés:
hoy palpita fuerte mi corazón,
el cerebro se desploma
ojalá pudiera hacer para ti
las mejores letras de mi inspiración
para que tú sientas ese aroma,
los mejores versos de mi poesía
con ese punto y esa coma
alentando esa sutil declamación
componiendo con todo mi interés.

Tú, mi pilar que queda
abandonando esta soledad;
no quisiera perder tu compañía
para mí toda una necesidad
el más grande día tras día.

Eres un buen padre:
me emociono al escribirte,
una y otra vez sentirte
para decirte: felicidades.

Hoy brillan letras en tu honor
esta es mi mejor oración;
eres agraciado en este día
sigues estando guapo en esta fotografía,
espero no pierdas la ilusión.

Te deseo tu mejor día:
en nombre de mi hermana
y de mamá, en la lejanía;
yo con una letra cortesana
detallada con gran interés:
«felicidades, Andrés» 
hoy tu grandeza ha inspirado este poema,
con mi insignia y emblema
para un aniversario de interés. 

Andrés Rastrilla, poeta de Castilla