miércoles, 4 de diciembre de 2019

Palabras y silencios. Semillas de familia


(Dedicada a su familia) 

Siempre un deseo poder agregar
buenos deseos y oraciones 
con la mejor de las decisiones;
va siendo hora de celebrar 
una familia para recordar 
y unir más nuestros lazos 
preparando la mejor de las reuniones
teniendo a nuestros mayores
dándonos besos y abrazos 
en una vida llena de interrogaciones.

Por aquellos antecesores 
que concibieron a nuestros padres
al calor de la lumbre 
siendo esos grandes sufridores.
Ahora están en los lejanos cielos 
esos perdidos mayores 
que llegaron a la cumbre 
con el mayor de los alardes 
y fueron nuestros abuelos.
Hoy les dedico mis mayores honores
escribiendo estos pequeños señuelos. 

La señora abuela Carmen 
y el sabio abuelo Valentín 
juntos crearon consigo 
esa latente semilla 
de dos apellidos de postín
a la espera que se guarden
dejando una huella que brilla 
y con mi letra bendigo:
esta es mi voz de Rastrilla
y esta es mi figura de Postigo. 

Patente esa bella flor 
que no se marchita:
dejo esos candentes alijos 
de cariños inquietos 
que fue despojando sus pétalos.
Frutos del flujo de ese amor 
se postró esa banderita 
vinieron aquellos hijos 
concibiendo los nietos 
llegando los primos, 
después los tataranietos,
bautizados con agua bendita
con esos deliciosos mimos 
y esa muestra de primor 
que esta gran familia necesita.

Hoy, día de alegrías 
y fecha de sentimientos,
va siendo ya la hora 
y llegado este mes 
de unir este gran plantel 
felicitando a mi padre Andrés 
incluyendo el aniversario 
para la tía Rosario 
y la más joven tía Isabel;
haciendo el mayor honor 
a esa grandiosa familia 
que desgranó sangre y sudor 
en esa imperiosa biblia 
que incluye este cartel 
que hoy deja muestras de dolor: 
cómo se fue el tío Tanis y la tía Cecilia, 
y la pérdida del tío Miguel .

Una inédita poesía 
este gran día necesita 
con el mayor de los honores 
recordando a nuestros mayores 
nos reuniremos en la ermita .

¡Familia, mis letras están contigo!:
por esta grandiosa semilla 
amparados por ese gran abrigo 
en un poema que brilla 
recordando a Valentín Rastrilla 
y también a Carmen Postigo.

Andrés Rastrilla, poeta de Castilla