domingo, 22 de diciembre de 2019
Miguel, portavoz de ilusión
Que nadie se asombre.
Voy a hablar de un gran padre,
de una grandísima persona
con inmejorables cualidades;
la muestra un gran hombre
que sube hoy a la trona
con mis letras por verdades .
Coherencia y constancia
se suman a la ilusión,
entregando su generosidad
con la mayor elegancia
sin dejar escapar la ocasión
ensalzando la felicidad
para dejar una dulce sustancia.
Me gustaría ponerte corona.
¡Gracias por ese gran favor!
haciéndome lograr un sueño
valorando mi persona
poniendo todo tu empeño,
sellando todo tu amor.
Hoy, primo, te debo un clamor
y, si antes no te lo dije, perdona.
Tú, que tienes un gran corazón ,
manifestando esa lealtad,
enseñando toda una lección
llevando esos buenos consejos,
acercando eso que parecía tan lejos:
ilustrando toda esa heroicidad
llevando a sentir grata emoción.
He conseguido subir otro peldaño
dando nuevo paso en la escalera;
gracias por esa gran amistad
retirando ese oscuro paño
atrayendo esa lejana quimera;
ayudando con tus reflejos
a extraer todos los conejos
guardados en la chistera
¡Gracias, primo, para ti mi ovación!
Y gracias también a tu compañera.
Tu me has hecho saborear la miel,
el sentido del honor
por eso te dedico esta inspiración,
queridísimo primo Miguel,
sigue siendo el mejor:
con mayúsculas en este papel
dejo con fuerza esta felicitación
y hoy te asciendo a coronel.