con un mensaje contundente;
rememorando alegrías,
despedazando tristezas,
como ultimo pasajero
en un insólito vagón,
del tiempo prisionero,
desmigajando correrías
desesperado con la referente
entregando la ultima ovación.
En las manecillas del reloj
de un tiempo justiciero,
anunciando otro eslabón,
preparando un nuevo listón
que ofrezca grandes fortalezas
de un nuevo año que nos llega;
que la esperanza no sea ciega
y haya un despertar de ilusión.
Andrés Rastrilla, poeta de Castilla
31 de diciembre de 2018