Pocas tradiciones han resistido al envite de "la peste" este infausto 2020, que se ha llevado por delante las fiestas patronales, las de verano, el festival de Reyes y tantas cosas más. Pero no ha podido con la salida senderista navideña, defendida con tenacidad por Loren y Mariángeles, secundados por otros dieciséis entusiastas que han desafiado, como siempre, a los rigores meteorológicos que por aquí se estilan a estas alturas del año. En esta ocasión, y aunque el día pintaba muy frío, no ha soplado el cierzo en toda la mañana y, por más que hayamos caminado entre algún copo de nieve, nos ha favorecido casi todo el tiempo ese tibio sol invernal que tanto se agradece en estos días.
![]() |
En la pista de despegue |
Como las ediciones anteriores, esta aportaba también un notable interés étnico-geográfico que, puestos a andar, ha cumplido y rebosado todas las expectativas. Ha sido muy emocionante "descubrir" el Aguachal, un paraje muy singular, de gran personalidad territorial y al que, humildemente, pedimos perdón por no haberle atendido como se merece tras más de medio siglo morando en sus inmediaciones. Pero nunca es tarde, se dice, si la dicha es buena.
![]() |
Parada reivindicativa ante La Choza |
La ruta giró pronto hacia Los Cascajos, con un homenaje reivindicativo junto a la choza, seriamente dañada y en riesgo de derrumbe, para seguir hasta la ermita de San Nicolás, al pie de la senda jacobea, donde nos dio por conmemorar la legendaria historia de aquel noble Manrique de Lara que vino a ser enterrado allí desde su muerte en tierras africanas. Sorteamos luego todas las prevenciones para admirar los sólidos arcos por los que somete a las aguas del Pisuerga el molino de Itero, y seguimos parejos a nuestro gran río hasta el paraje del Aguachal.
![]() |
Frente a San Nicolás, en la milenaria ruta jacobea |
En el vado que franqueaba el paso a Melgar de Yuso nos detuvimos a reponer fuerzas y, sobre todo, a especular. Primero, si por ese vado pasarían los romeros de la Virgen de la Vega, celebración que tan concurrida fue antaño por nuestros antepasados; luego, en qué lugar se proyectaría el gran puente de piedra que iba a conectar Melgar de Yuso con nuestro pueblo y que, como bien explica Jesús Borro en su miscelánea histórica sobre Pedrosa, se quedó en otra hermosa ilusión; luego, impresionados por la clara trazada arbórea del Aguachal, si ese cauce sería un antiguo desdoblamiento del Pisuerga o una mutación en su antiguo trazado, lo que explicaría que terrenos a nuestro lado del río pertenezcan al término municipal de Melgar de Yuso. Cuestiones todas ellas que se presentaban fascinantes sobre el terreno, habida cuenta de contar entre los caminantes con historiadores, curiosos, poetas, lugareños y generaciones de reemplazo. Y hasta con la aportación de un mapa del proyecto del mencionado puente que ofrecía una imagen del doble cauce del río.
![]() |
A la altura del vado de Melgar de Yuso |
La misteriosa cuenca del Aguachal, flanqueada con elegancia por dos hileras de árboles, nos llevó hasta "Los motores" del regadío, donde la ruta cobró su pequeño tributo épico, al verse obligados los caminantes a sortear sobre un tronco un imprevisto brazo de agua. Luego seguimos por los eternos caminos del regadío, rindiendo el tributo que merecen a la fuente de La Corvilla y la vadera del Odra. Por ese tramo la conversación versó sobre un bonito sueño, el de una senda peatonal que conectara el puente de Pedrosa con la vadera del regadío, siguiendo el curso del terraplén del Odrilla, en su margen derecha y aguas abajo. Pero esa cuestión merece ser tratada con calma en una sesión monográfica de este blog.
![]() |
A la entrada del ya mítico Aguachal |
Sobre las dos de la tarde, el sector ortodoxo del grupo (porque a unos cuantos disidentes la vuelta por la vadera les pareció una floritura excesiva y acortaron por el camino tradicional) tomaba unas cañas en el Teleclub, respetando la debida distancia de seguridad y casi emocionados por este mágico paréntesis navideño a tantas congojas y preocupaciones.
![]() |
El final de nuestra ruta y el arranque de la eventual senda fluvial del Odra |
Y para acabar, el tradicional resumen en vídeo de Loren, que condensa en un puñado de segundos toda la expedición.
Texto: Gerardo; Fotos: Ángel / Loren; Vídeo: Loren.