(Dedicado a Emilia)
Amanece al entrar
el regazo de la mañana
sonidos tras el cristal
cayendo gotas sobre el ventanal;
mensajes de pajarillos
comenzando a festejar,
anunciando el alba de la mañana.
el regazo de la mañana
sonidos tras el cristal
cayendo gotas sobre el ventanal;
mensajes de pajarillos
comenzando a festejar,
anunciando el alba de la mañana.
Hoy te veo entre silencios
con palabras escondidas,
viajando entre caminos
o en carreteras desconocidas;
visitando tus recuerdos,
destapando los mensajes
que llegan desde lo lejos,
intentando bajar escaleras
con peldaños mas bien pequeños,
buscando numerosas salidas
entre lánguidas esperas,
destapando hondos agujeros
esperando nuevos viajes
intentando soltar esas bridas
algo rotas y partidas
que no dejan ver esos paisajes.
Si este inédito panorama
no nos deja volver a la nostalgia
un pasado entre valores;
recuerdo a nuestros mayores
echamos la vista atrás
dibujando otros colores
acortando la distancia
en ese tiempo que resta
siguiendo el mejor compás
que la música nos reclama
de una gran orquesta
con solistas y tenores.
Hoy mis versos pueden hablar:
de sueños entre penumbra,
guerra destructiva sin armas
entre tiempos desolados
con un hilo conector
una sutil apariencia
intentando salvar esas almas
o no quedarnos desquiciados.
Debemos arrimar los caballos
y conseguir una diligencia;
intervenir con estupor
los fallos de nuestra conciencia
para buscar esos fallos
que un día nos dejaron desolados
encontrando esta penitencia.
Hoy el problema espanta:
amargura y melancolía
me levanto de la cama
buscando ese gran valor
intentando salvar el día a día.
Hoy abrigo con mi manta
encendiendo una luz de alegría
la sonrisa de una dama
que hoy se hace mas mayor .
¡Emilia es para mi un honor!
llevarte hoy a la fama
ojeando desde el mirador
en tiempos de rebeldía
para ti mi corazón canta
esperando un mañana mejor .
Andrés Rastrilla
Poeta de Castilla
20 de abril de 2020
