El 29 de diciembre de 2019, un grupo de arrojados pedroseños se lanzó de nuevo (esta expedición se va convirtiendo en una tradición navideña) a abrir camino por los campos de Pedrosa. En este caso, además del valor testimonial de difundir el deterioro de la choza, el objetivo era explorar la posibilidad de asentar, como se hizo con la ruta de la pedraja por el páramo, un itinerario consolidado por la vega.
El día, aunque permitió un paréntesis soleado en un mar de niebla, recibió a los caminantes con una intensa helada, que, eso sí, deparó esos paisajes de cuento que deja la cencellada. De todo ello queda aquí un sucinto testimonio gráfico.
 |
| Los expedicionarios, en posición de salida, frente al ayuntamiento. |
 |
| La fotografía da testimonio de la crudeza del día, en el que el sol pugna por aparecer entre la niebla. |
 |
| Foto-denuncia del derribo parcial de la choza, en los antiguos majuelos. |
 |
| En la "piscina" del regadío. Fuente royales. |
Y aquí el vídeo-resumen de la ruta.
