sábado, 14 de septiembre de 2019

Presentación de "Poesía entre dos milenios", de Andrés Rastrilla

Uno de los carteles anunciadores del evento que se
repartieron por las localidades aledañas
La tarde del día 17 de agosto de 2019, tuvo lugar un evento literario histórico en Pedrosa del Príncipe. Andrés Rastrilla, poeta hecho en el pueblo, presentaba, en una más que digna edición impresa, su poemario "Poesía entre dos milenios; antología poética (1985-2018)". Como los detalles de la edición del libro están referidos en su prólogo y también pueden verse en la grabación del acto disponible en Youtube, aquí solo trazaremos un breve comentario del desarrollo del acto. 

El pueblo arropó con mucho cariño, haciendo rebosar con su concurrencia la plaza de la iglesia, a su entrañable poeta. En un escenario sostenido sobre la plataforma instalada para el Tu cara me suena, se ubicó una mesa en la que, además del poeta, comparecieron el prologista y anotador del libro, su amigo Gerardo Manrique, Jesús Borro, que colaboró muy activamente en la edición y el "Rimador de Neila", Fermín, compañero de Andrés en las emisiones de Radio Evolución de Burgos.

Un momento de la presentación del libro, en la que Andrés Rastrilla toma la palabra
Tras la presentación de esta edición y la exhibición de retruécanos y sonetos del Rimador de Neila, tuvo lugar una muy emotiva declamación de diez de los poemas más celebrados de Andrés, por parte de un elenco de recitadores que, comenzando por él mismo y su Soy poeta y escritor, cuajó una memorable actuación. Tras este recitado, la cantautora burgalesa Daría Ras amenizó el acto con su música.

El público aguarda paciente, en una larga cola, a la firma del libro
Terminado el concierto, se procedió a la firma de los muchos ejemplares adquiridos por el público y se disfrutó de un vino español que se extendió hasta que se echó la noche. 

La belleza del escenario, la afluencia de público, una tarde de verano cálida, soleada y sin el incordio del cierzo, además de la brillantez de la sesión, lo convirtieron en un evento inolvidable. 

Quince días después de este acto, en el que Andrés recibió el cariño y la admiración de su pueblo, la vida le mostraría su cara más amarga, poniéndolo a prueba con un serio achaque de salud del que, por ventura, se repone felizmente. Así es la vida de tornadiza y poco de fiar, aunque la amemos tanto.

Iohannes Neoptolemus